
A partir del 28 de julio, Target dejará de igualar los precios de competidores como Amazon y Walmart, marcando el fin de una política que permitía a los consumidores pedir el mismo valor en productos idénticos durante o después de la compra.
La empresa justificó la decisión con un dato llamativo: según un vocero, los clientes “abrumadoramente comparan precios con Target, y no con otros retailers”. El cambio llega en un contexto desafiante para la cadena, que enfrenta caídas en ventas y tráfico, ajustes por aranceles y esfuerzos por redefinir su propuesta de valor.
Este movimiento también alinea a Target con otros gigantes del retail: ni Walmart ni Amazon ofrecen actualmente políticas de price match con la competencia. En lugar de competir con descuentos puntuales, Target apuesta a una estrategia de valor sostenido basada en precios bajos diarios, marcas propias accesibles y su programa de fidelización gratuito Target Circle.
La decisión, más que una retirada, parece ser una declaración: Target quiere que el foco ya no esté en competir con precios ajenos, sino en consolidar su propio valor percibido.